Hay muchas maneras de

 agregar más proteínas a tus comidas

1

Algunas buenas fuentes son carne, pollo, pescado, huevos, frijoles, nueces y semillas.

Elige alimentos ricos en proteínas:

Incluye al menos una en cada comida y merienda.

2

Hay opciones a base de plantas y de suero que se pueden agregar fácilmente a los batidos, la avena y otras bebidas.

Agrega proteína en polvo a los batidos y otras bebidas:

3

Ten a la mano nueces, semillas y huevos duros, para ayudarte a satisfacer tus necesidades de proteínas durante todo el día.

Come refrigerios ricos en proteínas:

4

La quinoa y el amaranto son más ricos en proteínas que otros granos, como el arroz y el trigo.

Elige granos ricos en proteínas:

5

Agrega aderezos ricos en proteínas, como pollo a la parrilla, tofu o frijoles.

Incorpora proteínas a las ensaladas:

Al añadir estos alimentos ricos en proteínas en tus comidas y refrigerios,

aumentas su ingesta de proteínas y apoyas el crecimiento y la reparación muscular.