El caos puede sanarnos
En estos tiempos podemos ver a nuestro alrededor y eso genera mucha ansiedad, estrés y angustia, pero si miramos más allá, es el caos lo que causa todo esto.
Nos sentimos sacudidos perdiendo el equilibrio y la paz porque todo lo que conocemos está siendo transformado de una manera muy rápida, nos sentimos indefensos y abandonados porque vemos que los gobiernos alrededor del mundo no pueden resolver los principales problemas que aquejan los países, porque en las empresas hay un alto nivel de desconfianza y muchas cosas han dejado de funcionar de la manera que siempre lo han hecho, porque estamos viviendo situaciones de la naturaleza que creíamos lejanas y que sólo imaginamos en las películas catastróficas de hace veinte años, nos sentimos vulnerables porque la violencia ha alcanzado índices nunca antes vistos y a eso lo llamamos caos.
El caos está aquí para sacudirnos, despertarnos y para que podamos transformar en nuevas formas todo lo que nos rodea, nuestros hábitos diarios y la manera en que interactuamos con los demás.
Realmente lo único que está pasando es que las cosas están dejando de ser como las conocemos, pasa que ya creíamos controlar todo, pasa que estamos simplemente viviendo las consecuencias y lógicos resultados de nuestras decisiones u omisiones en el pasado, o de nuestra indiferencia o de nuestra ignorancia. Son sólo resultados y que los movimientos que presentan nos regalan incomodidad y vulnerabilidad y te tengo una buena noticia, eso se llama salir del área de confort. ¡Claro! Estamos saliendo de esta zona un poco a empujones y forzados por las circunstancias.
Todo esto sólo podemos lograrlo dejando de sentirnos víctimas en nuestras relaciones, de nuestra familia, de nuestros trabajos, del sistema económico, de la corrupción, de nuestros gobernantes, de la naturaleza y hacernos responsables.
Son momentos para mirarnos a nosotros mismos, hacernos responsables y desde ahí conectar con los otros para que de esta manera, desde la colaboración, se puedan lograr verdaderos cambios. Estamos aprendiendo a responsabilizarnos de las decisiones políticas, ambientales, sociales, económicas, laborales, físicas, emocionales que tomamos.
No te agobies y libera la auto-exigencia que te hace sentir abrumado o abrumada, dejemos a un lado la exigencia que nos hace conectar con el miedo a ver de repente todas las consecuencias de los actos que como sociedad, humanidad y personalmente, hemos tomado en nuestras vidas. Es desde el auto-perdón y desde el perdón al otro que podemos posicionarnos de una nueva forma en esta responsabilidad para solucionar pero sobre todo, para cambiar, porque no podemos regresar a las viejas soluciones y prácticas que perjudican el ambiente, que fomentan la corrupción, que permiten la desigualdad de género, etc. Hace mucho aprendimos a tratarnos de una manera poco amorosa a nosotros mismos exigiéndonos muchas veces ser algo que no somos, exigiéndonos hacer todo perfecto. Pero estos nuevos cambios no pueden venir del miedo, de la ansiedad, del estrés, de la exigencia, sino de la paz, el perdón, la responsabilidad y nuestros impulsos amorosos que nos motiven a movernos porque a veces estamos paralizados.
Seamos leales a nuestra felicidad y con responsabilidad generemos mejores relaciones personales al hacernos responsables de nuestra vulnerabilidad cuando no recibimos lo que queremos como queremos. Cada quien tiene derecho a ser diferente, a ser como es, no tiene la obligación de cubrir nuestras necesidades emocionales, económicas ni intelectuales, simplemente ES. Y para amarnos, para ser amigos o colaborar juntos sólo tenemos que respetarnos y hacernos cargo de nuestras propias emociones, de nuestras expectativas.
Los cambios pueden empezar poco a poco en las actividades diarias del hogar, siendo pacientes con el hecho de que aún no existen todos los medios para dejar de ser tan dañinos para el medio ambiente, siendo menos indiferentes y tratando de que los hábitos se vayan transformando lo más pronto posible. Siendo pacientes y amorosos cuando nuestra palabra se encuentra con una persona con menos conciencia ambiental que nosotros y en lugar de señalarlos, acompañemoslos en el aprendizaje y despertar.
Todos somos UNO y creo que todos estamos cansados de los aprendizajes de vida individuales y colectivos a base de golpes, elijamos que a partir de ahora nuestras experiencias de aprendizaje sean más amorosas. Sé paciente y amoroso contigo y con la otra persona en este proceso, pero comprométete y sé responsable de lo que aportas día a día a los animales y el medio ambiente que nos acoge diariamente. Sanemos nuestra Madre Tierra y sanaremos también nosotros.
Seamos responsables de que la situación política no sólo de nuestro país, del mundo refleja mucho las mañas ocultas en nosotros. Dejemos de transmitirles nuestra responsabilidad en los vicios que alimentan la deshonestidad, la corrupción, la violencia, la división, el clasismo, el racismo, el machismo, las diferencias de género y las injusticias. Los cambios pueden empezar desde nosotros, nuevamente con compromiso y responsabilidad, siendo honestos en todo lo que emprendemos en nuestros ambientes, deteniéndonos a ayudar a quien lo necesite, respetando los animales y el medio ambiente, leyendo sobre economía y política, sobre todos aquellos temas que quizás consideras aburridos pero que al obtener conocimiento dejaremos de ser víctimas de la ignorancia y tomaremos mejores decisiones, seremos menos indecisos y pasivos ante las cosas que pasan a nuestro alrededor.
Seamos creativos y confiemos en que podremos mejorar las cosas mirando nuevas posibilidades si nos decidimos a dejar a un lado la ilusión de que la paz la da el control. La paz la da la oportunidad de que cambiemos en conciencia, que nos responsabilicemos tomando decisiones, que seamos creativos en encontrar nuevas formas, que seamos pacientes con el proceso, que en lugar de auto-exigirnos o sobre exigir a los demás, nos perdonemos.
Ya sea porque mis palabras te resuenan al nivel personal, en una relación de pareja, en tu grupo de trabajo, en tu situación de salud, porque estás sin trabajo, porque dudas en emprender, porque quieres incorporar nuevas formas de ser amigable con el medio ambiente, en tu negocio o en tu hogar, porque trabajas en gobierno o en una empresa. Como sea, deja de caminar con miedo y ansiedad, ábrete a las posibilidades tomando responsabilidad de ti, comprometámonos con hacer cambios día a día, paso a paso y creamos que podemos crear nuevas realidades. Somos creadores, cocreadores de nuestra realidad. Tenemos la responsabilidad de transformarla y transformarnos. Es momento y es perfecto.
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